"El rendimiento pasado no es indicativo de resultados futuros". Eso es mayormente cierto, pero ¿es siempre cierto? Hay ejemplos en los que el desempeño pasado puede proporcionar orientación sobre lo que podría persistir. Tomemos el oro. En los últimos 55 años, el oro se compuso a un ritmo de aproximadamente el 9% anual, mientras que las materias primas como el maíz, la soja y el trigo se acercaron al 2%. Las propiedades monetarias únicas del oro y la escasez probablemente expliquen esta divergencia a largo plazo. Entendiendo esto, no sería razonable esperar que la soja comience a superar repentinamente al oro en los próximos 55 años. Entonces, ¿dónde trazamos la línea entre usar la historia como guía para el rendimiento futuro (incluido bitcoin) y sobreajustarla?