La evidencia es clara: los horarios de inicio temprano de la escuela chocan con la biología adolescente Retrasar el inicio de la escuela mejora el rendimiento académico, la salud mental y el bienestar general de los adolescentes Es probable que el sueño insuficiente de los primeros horarios contribuya significativamente a tasas más altas de TDAH, ansiedad y depresión Es hora de repensar los horarios escolares Las clases de la escuela secundaria y la universidad no deben comenzar antes de las 9 a.m.