Los micro y nanoplásticos están invadiendo los huesos humanos y pueden estar relacionados con enfermedades como la osteoporosis. Una nueva revisión resume los estudios que muestran que (in vitro) los microplásticos causan senescencia celular, modifican la expresión génica, aumentan el estrés oxidativo y la inflamación, promueven la descomposición ósea y afectan la diferenciación de las células madre. En los animales, los microplásticos se acumulan en los huesos, atrofian el crecimiento y dificultan la formación de huesos. Los impactos humanos no están claros, pero debemos comenzar a considerar cómo la exposición al plástico puede estar afectando la salud ósea, un componente clave de la longevidad.